Harold Ransburg desarrolló el primer sistema de aplicación electrostática en 1940 con la introducción del Ransburg No1. Otros desarrollos a lo largo de los años 50 y 60 conducen a que Ransburg logre niveles de eficiencia de transferencia de material de hasta el 98% con reducciones significativas en la sobre pulverización, lo que resulta en ahorros dramáticos y emisiones de VOC reducidas. Hoy en día, la tecnología de punta de Ransburg ha llevado al desarrollo de atomizadores rotativos tales como aplicadores de campana y disco.
Ransburg es el líder mundial en diseño y fabricación de productos de acabado electrostático manual y automático. Es líder en soluciones de acabado por aspersión para los principales mercados industriales y de fabricación de automóviles. Ransburg continúa perfeccionando su tecnología de pintura por pulverización electrostática más eficiente, brindando un acabado de “Clase A” a todos y cada uno de los productos del cliente, al tiempo que reduce las emisiones de VOC y proporciona una excelente atomización y eficiencia de transferencia.
La innovación más reciente de Ransburg, la Ransflex, ha reinventado la pistola de pulverización electrostática manual. Han creado un aplicador que funciona solo con aire comprimido que utiliza un alternador accionado por aire acoplado a un conjunto de cascada de alto voltaje que se utiliza para generar la carga electrostática internamente, eliminando la necesidad de una fuente de alimentación externa y un cable.